Desaparecen redes sociales de Sandra Cuevas tras acusaciones de extorsión y presunta investigación en EU

La exalcaldesa de Cuauhtémoc, Sandra Cuevas, eliminó sin previo aviso todas sus cuentas en redes sociales (X, Facebook e Instagram) este 2 de mayo, generando especulaciones sobre su situación legal. La política y empresaria, reconocida por exhibir su estilo de vida lujoso y promocionar su conglomerado empresarial Diamond Group —con negocios como gimnasios, una marca de tequila y agencias de viajes—, mantenía una activa presencia digital hasta ahora.

El hecho ocurre en medio de acusaciones públicas de la actual alcaldesa de Cuauhtémoc, Alessandra Rojo de la Vega, quien denunció a Cuevas por presunta extorsión tras divulgar un audio donde, supuestamente, la exfuncionaria exigía a trabajadores cobros de piso a comercios. Rojo de la Vega aseguró que el audio es auténtico y vinculó estos actos con el financiamiento del estilo de vida y empresas de Cuevas.

¿Investigación internacional?

Simón Levy, exsubsecretario de Turismo federal, reveló que Cuevas sería investigada por el Departamento de Justicia de Estados Unidos por lavado de dinero, aunque no hay confirmación oficial. A la par, las cuentas de Diamond Group también fueron desactivadas, mostrando mensajes de "contenido no disponible".

Reaparición en video… ¿o no?

El 3 de mayo, circuló en redes una entrevista donde Cuevas afirma residir en Cuauhtémoc, pero se trataba de una grabación de enero de 2024. La exalcaldesa no ha respondido a las más de 40 denuncias por corrupción presentadas por Rojo de la Vega ante la Fiscalía capitalina, incluyendo la reciente acusación de abril por cobros ilegales.

Deuda con un periodista

Gustavo Adolfo Infante, comunicador de espectáculos, reveló que Cuevas le debe 150 mil pesos por servicios para mejorar su imagen pública. Según Infante, la exalcaldesa incumplió el pago alegando falta de contrato formal y cortó comunicación.

Mientras autoridades no se pronuncian, el silencio digital de Cuevas alimenta rumores: ¿estrategia legal, huida de investigaciones o simple coincidencia? Sus seguidores y críticos exigen respuestas.