Gobierno federal destinará 41,000 mdp de impuesto a refrescos para combatir obesidad

En la conferencia matutina de este jueves, Eduardo Clark, subsecretario de Integración y Desarrollo del Sector Salud, anunció que el impuesto a las bebidas azucaradas se incrementará a $3.0818 por litro en 2026 (frente a los $1.6451 actuales), con lo que se espera recaudar 41,000 millones de pesos que se destinarán íntegramente a cuatro estrategias de salud: prevención, modernización de equipos, tratamientos innovadores y ampliación de atención renal. Clark destacó que México es el mayor consumidor per cápita de refrescos a nivel mundial (166 litros anuales por persona), y que cada 600 ml contienen aproximadamente 15 cucharadas de azúcar, lo que contribuye a que el 40% de las consultas médicas estén relacionadas con obesidad, diabetes e hipertensión.

Impacto en salud pública: cifras alarmantes

La medida busca combatir una crisis sanitaria que afecta especialmente a menores: uno de cada tres niños en México padece obesidad o sobrepeso, mientras que la diabetes causa 100,000 muertes anuales y más de 27,000 amputaciones. Clark recordó que el impuesto implementado en 2014 redujo el consumo en casi 10% en sus primeros años, y que esta nueva alza está alineada con políticas aplicadas en 119 países. Estudios globales respaldan la estrategia: en El Salvador, las bebidas azucaradas fueron responsables del 20% de los casos de diabetes tipo 2 en 2020, con costos médicos directos de $69.35 millones de dólares.

Destino de los recursos: desde campañas preventivas hasta diálisis

Los 41,000 millones de pesos se distribuirán en:

1. Campañas de prevención con videojuegos educativos y promoción de hábitos saludables.

2. Modernización de equipos para detección temprana de daño renal y monitores de glucosa en niños.

3. Tratamientos innovadores para control de obesidad y diabetes, disponibles para toda la población.

4. Ampliación de cobertura de diálisis y trasplantes renales, reduciendo listas de espera. El subsecretario enfatizó que atender a un paciente con diálisis cuesta $415,000 pesos anuales al sistema de salud, mientras que la prevención podría ahorrar miles de millones.

Contexto internacional y críticas

La medida se enmarca en una tendencia global: estudios de la Universidad Tufts publicados en Nature Medicine confirman que las bebidas azucaradas causan anualmente 2.2 millones de nuevos casos de diabetes tipo 2 y 1.2 millones de enfermedades cardiovasculares en el mundo. En América Latina, México y Colombia lideran las estadísticas, con hasta el 30% de los casos de diabetes vinculados a estas bebidas . Aunque la industria refresquera ha argumentado que el impuesto afecta desproporcionadamente a hogares de bajos ingresos, expertos en salud pública subrayan que los beneficios a mediano plazo superan los costos iniciales.