Explota cohete de SpaceX durante prueba en Texas; Musk minimiza incidente

Una nueva explosión sacudió las instalaciones de SpaceX en Starbase, Texas, la noche del miércoles, cuando uno de los prototipos del cohete Super Heavy —parte del sistema Starship con el que Elon Musk planea llegar a Marte— estalló durante una prueba de encendido estático. La detonación, registrada alrededor de las 23:00 horas (tiempo local), generó una gran bola de fuego y varias explosiones secundarias, sin que se reportaran personas heridas.

El incidente fue captado en vivo por cámaras del portal especializado NSF, mostrando cómo la nave, identificada como Ship 36 y programada para su lanzamiento a finales de este mes, se desintegró minutos antes de iniciar la prueba. SpaceX confirmó que el cohete “experimentó una grave anomalía”, aunque aseguró que la zona estaba despejada y no hubo riesgos para las comunidades cercanas.

La prueba formaba parte de los preparativos para el décimo vuelo de prueba de Starship. Según informes, la explosión ocurrió durante la carga de combustible, cuando el tanque de oxígeno ya estaba lleno y el de metano apenas al 10%, lo que posiblemente limitó el daño.

Elon Musk, dueño de la compañía, minimizó el incidente con un escueto comentario en X: “Solo un rasguño”.

Este es el cuarto fracaso consecutivo de una nave Starship de segunda generación. Las tres anteriores también terminaron en explosión, ya sea durante el ascenso o al reingresar a la atmósfera. El programa acumula retrasos importantes y aún no ha logrado validar el despliegue de satélites ni la reutilización total del sistema por fallas en componentes clave, como el escudo térmico o la puerta de la bahía de carga.

Starbase, sede de estas pruebas, ha sido objeto de polémica por su creación mediante referéndum entre los pocos habitantes de la zona, muchos de ellos empleados de la misma empresa. A raíz del accidente, las autoridades locales y SpaceX mantienen operativos de seguridad activos y pidieron no acercarse al área afectada.

Pese a los contratiempos, SpaceX insiste en que cada prueba ofrece aprendizajes cruciales y reafirma su meta a largo plazo: hacer posible la vida en otros planetas.